El PLAN DE DIOS va por más

Nuestros pensamientos, no son definitivamente de Dios,  Dios tenía un plan para mostrar todo su amor a la  humanidad,  tenía en su mente a decenas de hombres y mujeres en este momento y sin duda alguna a miles. Sembró la misma misión en  la madre Bertha López Chávez para que unidos por esta pasión,  pasión por Cristo y pasión por el hermano se convirtieran en uno solo y así poder estar después de ya 2 décadas siendo testigos de  la certeza de la Resurrección, hablamos de estos hombres y mujeres  quienes vemos hoy con un entusiasmo apasionado por vivir el amor,  la fe, la esperanza,  vivir su vocación  como profetas,  como mediadores entre Dios y los hombres pues para ellos los verbos no alcanzan para describir su dinamismo,  su pasión,  sus proyectos,  sus esperanzas y sus muchos ¿que mas?, siendo testigos de la Certeza de la Resurrección,  sí, ellos son Misioneras y Misioneros de Cristo Resucitado.

NMF Bertha López Chávez

 Es el lugar donde se cruza el diálogo amoroso de cada Misionera que se encuentra en formación con su Señor, que está real y verdaderamente presente en el hombre que sufre, es impresionante el ritual que se lleva todas las mañanas en este encuentro, “es la liturgia con el encuentro del Dios Vivo”. Es esa prolongación de la Lectio Divina que todos los días tienen. Es así, fuente y culmen del encuentro con él “Jesucristo”.

Se le contempla a través de esos ojos llorosos, de esas manos temblorosas o de ese rostro pálido, triste, desesperanzado, amenazado por la muerte, por la enfermedad, la adicción, su historia, la marginación, rechazo social, familiar.

Ese hombre se encuentra con Cristo a través de cada  Misionera, que lo asiste, que lo cura, que lo carga, que le consuela y que con un lenguaje no verbal le revela el Amor de Dios y su Misericordia.

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1. Para dar vida y Vida en abundancia.

CON LA FUERZA DEL EVANGELIO.

SIGUIENDO LOS PASOS DEL MAESTRO,  

DE JESUCRISTO.

¡¡¡¡ALABADO SEA CRISTO RESUCITADO!!!!

La Madre Bertha López Chávez (Fundadora de los Misioneros y Misioneras de Cristo Resucitado) y el Lic Javier López (Misionero Laico de Cristo Resucitado) así como un equipo preparado, acudió a socorrer y llevar a un Cristo Vivo, lleno de amor, de Esperanza, de misericordia a tanta gente que fue afectada por el terremoto en el 2016.

 Actualmente estamos atendiendo a niños con VIH en la Aldea Santa María de los Ángeles  en San Pablo del lago, Cantón Otavalo.